jueves, marzo 29

LA FE EN LA FIDELIDAD DE LOS AMIGOS


Para mi modo de sentir y de entender esta relación interpersonal como es la AMISTAD, existen cuatro palabras que articulan su sentido: Fidelidad, confianza, fe, confidencia. Tener fe en una persona es sentir confianza en que nos será fiel y poder fiarse de ella hasta el punto de poder hacerle confidencias.



Mi modo de pensar al respecto lo veo reflejado en la siguiente anécdota:
¡La copa de Alejandro...! Esta copa, que hace medio siglo aún gozaba de cierto prestigio, apenas si se recuerda ahora. Otras copas, trofeos preciados en las competencias deportivas, acaparan la atención del publico moderno y contadas personas podrían dar hoy una referencia aceptable de la copa de Alejandro, de Alejandro el Magno, símbolo __la copa, no Alejandro__ de la confianza, de la fe en la amistad.
Todo empezó con un baño a destiempo. Alejandro se metió en el Cidno, río famoso por la frescura de sus aguas, y como el famoso conquistador se hallase bastante sofocado, le sentó como un tiro certero. Los médicos de Macedonia no parece que estuviesen al tanto del tratamiento a seguir en casos tales y nada se atrevían a recetarle. ¿Que mixtura le preparo entonces Felipe de Acarnania? Se ignora, y es una lástima, porque su conocimiento habría aportado curiosos datos acerca de la medicina antigua.
Alejandro se dispuso a beberse la poción, confiando en que de un amigo tan antiguo como el de Acarnania nada malo podía esperar; pero en ese momento recibió carta de Parmenión, uno de sus mas brillantes generales, advirtiéndole que desconfiara de Felipe, que, en secreta inteligencia con Darío, rey de los persas, trataba de asesinarle y facilitar así la victoria de aquél.
Aunque Parmeniòn pesaba mucho en el animo de Alejandro, pudo mas la fe que le inspiraba su amigo de la infancia y, sin vacilar, bebió la copa que el de Acarnania le tendía. El Rey se curó, en efecto; la acusación resultó ser falsa y aunque de momento no pasaron de allí las cosas, al cabo, y por si conspiraban o no contra el, Parmenion, padre e hijo, fueron asesinados por orden de Alejandro. Y la copa, que parecía olvidada, pasó a simbolizar la confianza que deben inspirarnos los buenos amigos...mientras que éstos se comporten como tales. 

Diccionario ilustrado de anécdotas
(Gustavo Gili, Barcelona, 1965, pp. 46-47)


miércoles, marzo 28

EL AMOR Y LA EXISTENCIA DE LOS DEMÁS



El que ama de verdad desea la existencia del ser amado, siente que debe existir, que es bueno que exista y debe seguir en la existencia. Su valor interno lo pide. El amor verdadero no se reduce a querer el halago que producen ciertas cualidades de una persona. Se dirige a la persona como tal, como un ser real al que se estima profundamente.




Entre los seres humanos, solo se reconoce plenamente la existencia de aquellos a quienes se ama. La creencia en la existencia de otros seres humanos como tales es amor.
El único órgano de contacto con la existencia es la aceptación, el amor. Por eso belleza y realidad son idénticas. Por eso la alegría y el sentimiento de la realidad son idénticos.
Amor imaginario por las criaturas. Estamos atados por una cuerda a todos los objetos que nos atan, y una cuerda siempre puede cortarse. También estamos atados por una cuerda al Dios imaginario, al Dios cuyo amor es también atadura. Al Dios real no se está atado porque no hay en ese caso cuerda que pueda cortarse. Penetra en nosotros. Únicamente el puede penetrar en nosotros. Todas las otras cosas permanecen afuera, y no conocemos de ellas mas que las variable, tensiones de grado y dirección impresas a la cuerda cuando hay desplazamientos en ellas o en nosotros.
El amor tiene necesidad de realidad. Amar a través de una apariencia corporal a un ser imaginario, ¿que hay mas atroz, cuando uno se apercibe de ello? Mas atroz que la muerte, pues la muerte no evita que el amado haya sido. Es el castigo al crimen de haber alimentado el amor con la imaginación.
Es una cobardía buscar en los que se aman (o desear darles) otro consuelo que el que nos dan las obras de arte, que nos ayudan por el simple hecho de que existen. Amar, ser amado, es darse mutuamente esta existencia mas constantemente presente al espíritu. Pero debe estar presente como la fuente de los pensamientos, no como el objeto. Si hay el deseo de ser comprometido, no es para si, sino por el otro, a fin de existir para él.
SIMONE WEIL, La gravedad y la gracia
(Sudamericana, Buenos Aires, 1953,
pp. 246-250)

EL AMOR PATERNO




El amor de los padres a los hijos implica ante todo acogida, vibración de alma en la cercanía, amparo y ayuda incondicional



Nuestros hijos buscan nuestro arrimo,nos dirigen una mirada sonriente y nos piden no un favor positivo, no un acto que fomente su vida, sino una mera caricia. ¡Papá!  me llama mi hijo, y si le respondo, quiere que le diga: ¡Amado mio! Y se arrima a mi, se aprieta contra mi y allí se queda, gozándose en sentir mi arrimo y mi contacto, en tenerme junto a él y volviendo de cuando en cuando sus ojos a los míos para ver que le miro con cariño.


EL AMOR VERDADERO NO PIDE RECOMPENSA

JONEYED Y EL BARBERO


El santo Joneyed acudió a La Meca vestido de mendigo. Estando allí, vio cómo un barbero afeitaba a un hombre rico. Al pedirle al barbero que le afeitara a èl, el barbero dejó inmediatamente al hombre rico y se puso a afeitar a Joneyed. Y al acabar no quiso cobrarle. En realidad, lo que hizo fue dar ademas a Joneyed una limosna.

Joneyed quedo tan impresionado que decidió dar al barbero todas las limosnas que pudiera recoger aquel día.

Sucedió que un acaudalado peregrino se acerco a Joneyed y le entregó una bolsa de oro. Joneyed se fue aquella tarde a la barbería y ofreció el oro al barbero.

Pero el barbero le gritó: "¿ Qué clase de santo eres?. ¿No te da vergüenza pretender pagar un servicio hecho con amor?".



ANTHONY DE MELLO, El canto del 
pájaro
(Sal Terrae, Santander, 1988, pp. 153-154)



Aveces se oye decir a las personas: "Señor, he hecho mucho por Ti. ¿Que recompensa me vas a dar?"


La grandeza del amor auténtico radica en que su meta es la persona amada, no la recompensa que pueda obtener. Amor condicionado no es amor, es interés, reduce a la persona amada a medio para algún fin. El amor verdadero realza el ser amado, lo considera como algo digno de ser estimado de forma incondicional, absoluta, desligada de todo.






LA ENTREGA DESINTERESADA NOS ENRIQUECE



Es un curioso secreto de la sabiduría de todos los tiempos, pero un secreto muy sencillo, que cualquier entrega desinteresada, cualquier participación, todo amor nos enriquece, mientras que todo esfuerzo por adquirir posesiones y poder resta fuerzas y empobrece. Esto lo sabían y enseñaron los hindúes, y mas tarde los sabios griegos, y miles de sabios y poetas cuyas obras sobreviven a los tiempos, mientras que los reinos y reyes de su época pasaron y cayeron en el olvido. En cualquier caso, la sabiduría última es que ni el poder, ni los bienes, ni el conocimiento traen la dicha, sino solo el amor. Todo desinterés, toda renuncia por amor, toda compasión activa, toda renuncia a si mismo parece que es entregar, privarse de algo, y sin embargo es enriquecerse y engrandecerse y es el único camino que lleva hacia adelante y hacia arriba.



El amor, cuando se lo entiende pobremente como mera pasión, tiene un carácter posesivo. "La poseí", decían los galanes en nuestras comedias clásicas para indicar que habían tenido una relación erótica. Es un grave error confundir amor con posesión, porque el que posee a una persona no puede encontrarse con ella.

lunes, marzo 26

LA AMISTAD GENERA CONFIANZA



Una de las características de los buenos amigos es la confianza en el trato mutuo. Como el encuentro humano implica, al mismo tiempo, cercanía y distancia, la confianza no debe nunca extralimitarse, para no causar molestias o resultar chabacana. Mantenida en sus justos limites, cobra a veces acentos de una indefinible ternura, como sucede en la anécdota siguiente:

Cuando murió Madame de la Sablière (1693), La Fontaine, que había vivido en su casa durante veinte años, se encontró completamente desamparado. Su amigo, el consejero D'Hervat, al conocer la noticia de la defunción, pensó inmediatamente en el viejo fabulista y resolvió, de acuerdo con su mujer, ofrecerle hospitalidad. Al dirigirse a la casa mortuoria encontró en la calle a La Fontaine.
__Querido amigo __le dijo D'Hervat__, mi mujer y yo hemos calculado la inmensidad de vuestra pena y soledad, y os rogamos que vengáis a nuestra casa.
La Fontaine abrió los brazos a su amigo y dijo, con la mayor sencillez:
__A ella iba.
Diccionario Ilustrado de anecdotas
(Gustavo Gili, Barcelona, 1965, p. 46)

     
La confianza ha de crecer a medida que florece la amistad





  


LA ATRACCIÓN DE LA VERDADERA AMISTAD


Una amistad que puede terminar nunca fue verdadera                                                                                                                          San Jerónimo, Epístolas (3,6)


Sin embargo, aquel déspota tenia también aspectos humanamente simpáticos. Cuando el filósofo pitagórico Fincias, condenado a muerte por él, le pidió un día de permiso para ir a su casa, fuera de la ciudad, a ordenar sus asuntos, Dionisio consintió con tal que dejase como rehén a su amigo Damón. Y, cuando vio presentarse a éste confiadamente y a Fincias llegar a tiempo, en vez de hacerle matar, pidió humildemente ser admitido en la amistad de ambos, que le había conmovido.

INDRO MONTANELLI, Historia de los griegos
(Plaza y Janes, Barcelona, 1982, p. 216)

Una amistad ha llegado a madurez cuando uno está dispuesto a correr riesgos por el amigo. La amistad acrisolada a través de la prueba se presenta aureolada de una halo de especial nobleza. Y resulta sobremanera atractiva, como se resalta en la anécdota de Dionisio, tirano de Siracusa (Sicilia)

 Province of Syracuse 



PRIMACÍA DE LA AMISTAD PURA

La amistad verdadera constituye un fin en si misma porque implica una unión entrañable con una persona en cuanto tal.

Amistad Pura


Me parece que a nada nos encamina la naturaleza tanto como a la sociedad; y ya dijo  Aristóteles que los buenos legisladores fueron mas cuidadosos de la amistad que de la justicia. Mas el punto extremo de la perfección de una amistad consiste en que sea pura, porque las que forman la voluptuosidad, el provecho o la conveniencia pública o privada, son mucho menos generosas y bellas, y menos amistosas tambien, puesto que mezclan la amistad, causas, fines y frutos ajenos a ella misma.

***
¡Estas cosas son inimaginables a quienes no las han probado, y me llevan a citar con elogio la respuesta que dio cierto joven soldado a Ciro, quien le preguntaba si cambiaría por un reino el caballo que acababa de hacerle ganar el premio en las carreras. "Por un reino no, señor --dijo el joven--; yo lo cedería con gusto a cambio de una amigo, si hallase hombre digno de ello." El "si hallase" no era, en verdad, inadecuado, porque se encuentran fácilmente hombres idóneos para una amistad superficial, pero en esta otra, tan grande, es menester que todo sea neto y completo.

MONTAIGNE, Ensayos(2)
(Orbi, Barcelona, 1984, PP. 135-142)


Las amistades verdaderas son eternas.
               CICERON, De Amicitia (9,32)



LA ENTREGA ES LA ESENCIA DEL VERDADERO AMOR




La primera condicion de las relaciones interpersonales es la generosidad, y ésta  florece naturalmente en el darse, años luz superior al mero dar. El abrirse con actitud de disponibilidad es condición de toda verdadera amistad. 
Salinas adivina esta ley del desarrollo humano en la experiencia amorosa, tal como se lee a continuación

Lo que nos queda palpita
en lo mismo que nos damos.
¡Darte, darte, darnos, darse!
No cerrar nunca las manos.
No se agotarán las dichas,
ni los besos, ni los años,
si no las cierras. ¿No sientes
la gran riqueza de dar?
La vida
nos la ganaremos siempre,
entregándome, entregándote.

PEDRO SALINAS, Razón de amor
(Alianza Editorial, Madrid, 1981, pp. 86-87


domingo, marzo 25

EL AMOR NOS SITÚA EN LA VERDAD





Yo iba por caminos pérfidos,
dolorosamente vacilante.
Tus queridas manos me guiaron.
Tan pálida en el lejano horizonte
lucia una débil esperanza de aurora,
tu mirada fue la mañana.
Ningún ruido si no su paso sonoro
alentaba al viajero.
Tu voz me dijo: ¡Continua!
Mi corazón cobarde, mi sombrío corazón
lloraba, solo, en su triste ruta;
el amor, vencedor delicioso,
nos reunión en la alegría.


PAUL VERLAINE, La buena cancion, XX, 
en Romanzas sin palabras
(Catedra, Madrid, 1991, p. 119)


La relación interpersonal nos realiza como personas, nos guía por el sendero justo, nos da impulso, nos llena de alegría, nos lleva a la meta de nuestra experiencia




sábado, marzo 24

LA AMISTAD, CUESTIÓN DE SENSIBILIDAD Y VIRTUD

La amistad no nos viene como un don del entorno, ni por instinto; es fruto de un esfuerzo realizado en común por personas sensibles a la convivencia y a la conducta virtuosa, es decir: creadora de unidad y solidaridad


Es un contrato tácito entre dos personas sensibles y virtuosas. Digo sensible, porque un montaje, un solitario, puede no tener nada de malvado, y vivir sin conocer la amistad. Digo virtuosas, porque los malvados solo tienen cómplices; los lascivos, compañeros de libertinaje; los interesados, socios; los políticos reúnen partidarios, la mayoría de los hombres ociosos tienen relaciones, los príncipes tienen cortesanos; solo los hombres virtuosos tienen amigos. Cetego era el cómplice de Catilina, y Mecenas el cortesano de Octavio; pero Cicerón era el amigo de Ático.
¿Qué significa este contrato entre dos almas afectuosas y honradas? Las obligaciones son mas fuertes o mas débiles, según el grado de sensibilidad y el numero de los servicios prestados, etc.
El entusiasmo de la amistad ha sido mas fuerte entre los griegos y entre los árabes que entre nosotros. Los cuentos que estos pueblos han imaginado sobre la amistad son admirables; nosotros carecemos de historias semejantes, somos un poco secos de todo.
VOLTAIRE, Diccionario filosófico
(Argos Vergara, Barcelona, 1968, p. 371)




EL AMOR TIENE SU LÓGICA PROPIA


__Mi amigo no ha regresado del campo de batalla, señor. Solicito permiso para salir a buscarlo.
__Permiso denegado replicó el oficial__. No quiero que arriesgue usted su vida por un hombre que probablemente ha muerto.
El soldado, haciendo caso omiso de la prohibición, salió, y una hora mas tarde regresó mortalmente herido, transportando el cadáver de su amigo.
El oficial estaba furioso: "¡ Ya le dije yo que había muerto! ¡Ahora he perdido a dos hombres! Dígame, ¿ merecía la pena salir allá para traer un cadáver?"
Y el soldado, moribundo, respondió: "¡Claro que si, señor! Cuando lo encontré, todavía estaba vivo y pudo decirme: Jack... estaba seguro de que vendrías."

ANTHONY DE MELLO, La oracion de la rana
(Sal Terrae, Santander, 1989, p. 201)



En la vida humana hay formas muy distintas de ver las cosas y los acontecimientos. Un poeta ve un bosque de una manera; un maderero de otra. Ambos piensan y razonan con rigor, siguiendo las lineas que les marca su propósito final y la perspectiva que adoptan. Esa linea tiene una peculiar coherencia, digamos una "lógica" especifica. El amor presenta una lógica especial, que no está sometida al cálculo, a la previsión de ventajas, al logro de eficacia. Por eso se dice que es "ciego", pero resulta clarividente para ciertas experiencias que se viven en las profundidades del espíritu. 

jueves, marzo 22

LA UNIÓN HACE LA FUERZA



La unidad, bien vista, constituye en la vida del hombre una meta, un fin. Debe ser cultivada por el valor que tiene de por si. Estar unidos es ya un logro definitivo, porque el encuentro perfecciona a los seres humanos 

El León y los tres toros

Una vez tres toros estaban paciendo en un prado. Oculto tras unos matorrales acechaba un león; pero no se atrevía a atacarlos porque estaban los tres juntos. Pensó emplear la astucia; y acercandose comenzó, con pérfidas insinuaciones, a fomentar la desconfianza entre ellos.
La estratagema tuvo pleno éxito: los tres toros empezaron a mirarse con recelo, y al poco rato se fueron apartando uno de otro, esquivándose deliberadamente y paciendo cada cual por su cuenta.
No esperaba otra cosa el león.
Se arrojo sobre el primer toro, luego sobre el segundo y finalmente sobre el tercero, y los destrozo.
Enciclopedia UTEHA para la juventud
(Montaner y Simon, Barcelona, 1965,
vol II, p. 114)

La discordia que divide a los amigos es la mejor arma para los enemigos.





martes, marzo 20

1.- AMISTAD

Una de las relaciones interpersonales mas nobles del movimiento amoroso

EL AMIGO, UN SER "ÚNICO EN EL MUNDO"

   Si leemos a ANTOINE DE SAINT-EXUPÈRY, El Principito (Alianza Editorial, Madrid, 1953, pp. 80-88) nos damos cuenta que el zorro (que no desempeña allí el papel de la astucia sino el de la sabiduría) le hace ver al "principito", la parte noble de nosotros mismos, la que busca la amistad incluso en las situaciones mas duras y que si cumplimos ciertas condiciones necesarias tales como: paciencia, dedicación, entrega..., uno se convierte para el otro en algo "Único en el mundo" y se torna insustituible.

LA AMISTAD SE PRUEBA EN LA ADVERSIDAD

Si uno, al cultivar amistades, se busca a si mismo, apenas resistirá la tentación de abandonar a los amigos cuando se conviertan en un problema. Tal defección constituye para éstos una penosa decepción. No hay nada menos noble que reducir al amigo a medio para los fines de uno, en vez de considerarlo como un fin en sí, digno de toda estima y respeto.

Los caimanes y el oso
(Fábula que muestra que las desgracias prueban a los amigos de verdad)

Dos amigos iban por el mismo camino. De repente, apareció un oso. Uno de ellos se subió precipitadamente a un árbol y allí se escondió. El otro, a punto de ser atrapado, de dejó caer en el suelo y se hizo el muerto. El oso le arrimò el hocico y le olfateaba, mientras èl contenìa la respiracion, porque dicen que el oso no toca un cadaver. Cuando se marchò, el del arbol le preguntò què le habia dicho el oso al oido, èste respondiò: "No viajar en adelante en compañia de amigos semejantes, que no permanecen al lado de uno en los peligros."
Esopo, Fábulas
(Gredos, Madrid, 1978, p. 71)