lunes, julio 30

LA TETERA


 Erase una vez una tetera muy arrogante; estaba orgullosa de su porcelana, de su largo pitón, de su ancha asa; tenía algo delante y algo detrás: el pitón delante, y detrás el asa, y se complacía en hacerlo notar. Pero nunca hablaba de su tapadera, que estaba rota y encolada; o sea, que era defectuosa, y a nadie le gustaba hablar de los propios defectos, ¡bastante lo hacen los demás!. Las tazas, la mantequera y la azucarera, todo el servicio de té, en una palabra, a buen seguro que se había fijado en la hendidura de la tapa y hablaba más de ella que de la artística asa y del estupendo pitón. ¡Bien lo sabía la tetera                                                               

 __!¡Las conozco! __decía para sus adentros__. Pero conozco también mis defectos y los admito; en eso está mi humildad, mi modestia. Defectos los tenemos todos, pero una tiene también sus cualidades. Las tazas tienen un asa, la azucarera una tapa. Yo, en cambio, tengo las dos cosas, y además, por la parte de adelante, algo con lo que ellas no podrán soñar nunca: el pitón, que hace de mí la reina de la mesa de té. El papel de la azucarera y la mantequera es de servir al paladar, pero yo soy la que otorgo, la que impero: reparto bendiciones entre la humanidad sedienta; en mi interior, las hojas chinas se elaboran en el agua hirviente e insípida.
Todo esto pensaba la tetera en los despreocupados días de su juventud. estaba en la mesa puesta, manejada por una mano primorosa. Pero la primorosa mano resultó torpe, la tetera se cayó, rompióse el pitón y rompióse también el asa; de la tapa no valía la pena hablar; ¡bastante disgusto había causado ya antes! La tetera yacía en el suelo sin sentido, y se salía toda el agua hirviendo. Fue un rudo golpe, y lo peor fue que todos se rieron: se rieron de ella y no de la torpe mano.

__¡Este recuerdo no se borrará nunca de mi mente! __exclamó la tetera cuando, más adelante, relataba su vida__. Me llamaron inválida, me pusieron en un rincón, y al día siguiente me regalaron a una mujer que vino a mendigar un poco de grasa del asado. Descendí al mundo de los pobres, tan inútil por dentro como por fuera, y, sin embargo, allí empezó para mí una vida mejor. Se empieza siendo una cosa, y de pronto se pasa a ser otra distinta...Me llenaron de tierra, lo cual, para una tetera, es como si la enterrasen; pero entre la tierra pusieron un bulbo. Quién lo hizo, quién me lo dio lo ignoro; el caso es que me lo regalaron. Fue una compensación por las hojas chinas y el agua hirviente, por el asa y el pitón rotos. Y el bulbo depositado en la tierra, en mi seno, se convirtió en mi corazón, mi corazón vivo; nunca lo había tenido. Desde entonces hubo vida en mí, fuerza y energías. Latió el pulso, el bulbo germinó, estalló por la expansión de sus pensamientos y sentimientos, que cristalizaron en una flor. La vi, la sostuve, me olvide de mi misma ante su belleza. ¡Dichoso el que se olvida de sí por los demás! No me dio las gracias ni pensó en mí; a él iban la admiración y los elogios de todos. Si yo me sentía tan contenta, ¿cómo no iba a ser ella admirada? Un día oí decir a alguien que se merecía una maceta mejor. Me partieron por la mitad; ¡ay, cómo dolió!, y la flor fue trasplantada a otro tiesto más nuevo, mientras a mí me arrojaron al patio, donde estoy convertida en cascos viejos. Mas conservo el recuerdo, y nadie podrá quitármelo.
HANS CHRISTIAN ANDERSEN, Cuentos completos
(Labor, Barcelona, 1959, pp. 649-651)

A LA VUELTA DE CIERTAS VANIDADES, CONVIENE APRENDER QUE LO IMPORTANTE ES LA VIDA QUE UNO ALBERGA EN SU SER PARA OFRENDARLA A LOS DEMÁS. ESA GENEROSIDAD NOS HACE AUTÉNTICOS



domingo, julio 15

LIBERTAD

HEMOS DE ACTUAR CON LIBERTAD INTERIOR

Es llamativo que seamos muy celosos de nuestra libertad y, al mismo tiempo, nos dejemos esclavizar por el temor al "que dirán". Afirmamos orgullosos nuestra independencia para someternos seguidamente al imperio de la opinión pública.




LA HISTORIA DEL BURRO

Erase una vez un viejo que tenía un burro al que quería vender. Un día él y su hijo, y el burro, por supuesto, fueron al mercado. El camino era largo, hacía calor y al viejo no le apetecía andar.
   __Ya que tenemos un burro, usémosle mientras podamos __dijo, y se subió en él. El hijo se agarró al ramal del burro y siguieron el camino.
   __¿No te da vergüenza, viejo? __le dijo alguien por el camino. Tú en burro mientras tu hijo tiene que caminar.
   El viejo se sonrojó y pareció avergonzado. Se bajó del burro y sujetó el ramal.
   __Móntate un rato  y yo sujetaré al burro __dijo a su hijo.
   A continuación se encontraron con unas señoras que venían del mercado
   __¿No te da vergüenza? --gritaron, levantando los puños contra el joven__. Un joven como tú montando en burro mientras tu anciano padre va andando.
   La cara del joven se puso tan roja como la de su padre momentos antes.
   __Las señoras tiene razón, padre. Yo no debería ir descansando mientras tú caminas.
   ¿Por qué no nos montamos los dos? --dijo el viejo
   El burro siguió con los dos hombres sobre é.
   ¿No os da vergüenza? __gritaron unos hombres que recogían heno en un campo cercano__. Dos adultos encima de un pobre burro. ¿Cómo podéis ser tan crueles?
   El viejo y su hijo bajaron rápidamente.
   __Ya sé lo que podemos hacer __dijo el joven por fin__. En lugar de que el burro nos lleve, nosotros llevaremos al burro.
   Los hombres fueron recibidos con grandes carcajadas de burla, mientras se esforzaban en llegar al mercado llevando al burro sobre sus hombros.
   __¡Fíjate, dos hombres llevando a un burro, cuando el burro está hecho para llevarlos a ellos __gritaba la gente a coro.
   __Por intentar dar gusto a todos __dijo el viejo__, no hemos agradado a nadie. En el futuro seremos nosotros los primeros en agradarnos.
365 Cuentos para dormir
(Everest, León, 1994, p. 35)




EL CORAJE Y LA LIBERTAD 
No deseo que me liberes de todos los peligros, sino valentía para enfrentarme a ellos. No pido que se apague mi dolor, sino coraje para dominarlo. No busco aliados en el campo de batalla de la vida, sino fuerzas en mí mismo. No imploro con temor ansioso ser salvado, sino esperanza para ir logrando, paciente, mi propia libertad.
¡Concédeme que no sea un cobarde, Señor, que sólo sienta tu misericordia en mi triunfo; sino que descubra el poder de tu mano en mi fracaso!
 Rabindranath Tagore
Premio Nobel de literatura en 1913. 
(Primer laureado no europeo en obtener este reconocimiento) 




LEMA QUE DEBERÍA SEGUIR TODO SER HUMANO


jueves, julio 5

SER AGRADECIDO A TIEMPO




Agradecer no se reduce a unas palabras de cortesía; implica la voluntad de crear con el donante una relación de generosidad parecida a la que él se adelantó a establecer. Dejar pasar ese momento y tener un recuerdo agradecido encierra cierto valor, pero resulta ineficaz, porque puede reducirse a un mero sentimiento interno.

Hoy con un año mas de vida quiero agradecer a todos y cada uno de los seres con quienes me he tropezado a lo largo de mi existencia..Gracias por todo lo que me han entregado, por todo lo que hemos compartido, por todo el afecto que me han dado, muy especialmente a Mi rubia princesa Betzemhel (estuviste cuando mas te necesitaba).

Si me ves triste

Si algún día me ves triste no me digas nada, solo quiéreme.
Si me encuentras en la soledad de la oscura noche, no me preguntes nada.
Solo acompáñame.
Si me miras y no te miro no pienses nada, compréndeme.
Si lo que necesitas es amor no tengas miedo, ámame.
Pero si alguna vez dejaras de quererme no me digas nada.
Recuérdame.




Hoy reconozco y deploro mi mezquindad. Es algo que suele suceder con los muertos: lamentar no haberles dicho a tiempo cuánto los amábamos y lo necesarios que eran para nosotros. Cuando alguien imprescindible se va de tu lado, vuelves los ojos a tu interior y no encuentras más que banalidad, porque los vivos, comparados con los muertos, resultamos insoportablemente banales. Pero un día adviertes que aquel que te ayudó a ser quien eres se ha ido de tu lado y, entonces, te dueles inútilmente de tu ingratitud. Tal vez las cosas no puedan ser de otra manera, pero resulta difícilmente tolerable. La imposibilidad de poder replantearte el pasado y rectificarlo, es una de las limitaciones más crueles de la condición humana. La vida sería más llevadera si dispusiéramos de una segunda oportunidad.

miércoles, julio 4

FELIZ DÍA AMIGOS LECTORES


No limites el poder de tu vida.
No pienses que conseguirás todo lo que deseas en esta vida.
Pero confía, porque ella es eterna, infinita.
No pienses, además, que después de ésta, vas a empezar una diferente: nada de eso.
Esta misma vida continuará siempre.
Por lo tanto, procura aumentar tus conocimientos y perfeccionarte, comprobando cómo es efímero el momento actual, comparado con la eternidad.


Cualquier día de tu vida, me recordaras de alguna manera aunque no me necesites ahora.
Yo permaneceré en tu corazón y tu en el mio...
Solo di mi nombre..y ahí estaré.

martes, julio 3

FIDELIDAD

LA HUELLA DEL LEÓN

Cuando diversos indicios señalan hacia una persona como culpable de una acción indigna, tendemos inmediatamente a sacar conclusiones definitivas sin tomar medidas. A menudo, vemos más tarde que había sido una confluencia fortuita de circunstancias y aprendemos a ser más cautos en el futuro.





Es caprichoso el azar...no te busqué ni me viniste a buscar..tu estabas donde no tenías que estar y yo pasé sin querer pasar...Tanto tiempo esperándote..que caprichoso el azar!!

Oí decir que un rey amaba mucho a las mujeres y no tenía otra mala costumbre salvo ésta; y estaba un día el rey encima de un sobrado muy alto, y miró abajo y vio una mujer muy hermosa, y le gustó mucho, y envió a requerirle su amor. Ella dijo que no lo podría hacer estando su marido en la ciudad. Y cuando el rey esto oyó, envió a su marido a la guerra. Y la mujer era muy casta y muy buena y muy sabia, y dijo:
   __Señor, tú eres mi señor y yo soy tu sierva, y lo que quieras tú lo quiero yo, pero me iré a los baños a arreglar.
Y cuando volvió, le dio un libro de su marido en el que se hablaba de leyes y de juicios de reyes, de cómo castigaban a las mujeres que cometían adulterio, y dijo:
   __Señor, lee en este libro hasta que me arregle.
Y el rey abrió el libro y encontró en el primer capítulo cómo debía prohibirse el adulterio, y se avergonzó mucho, y le pesó lo que quería hacer; y dejó el libro en el suelo y salió por la puerta de la habitación, y dejó los zapatos bajo el lecho en el que había estado sentado. Y en esto volvió el marido de la guerra, y cuando se instaló en su casa, sospechó que allí había dormido el rey con su mujer, y tuvo miedo y no se atrevió a decir nada por miedo al rey, y no se atrevió a entrar donde ella estaba.
Y duró esta situación mucho tiempo, y la mujer les contó a sus parientes que su marido la había abandonado y no sabía ella por qué razón; y ellos dijéronle al marido;
   __¿Por qué  no te acercas a tu mujer?
   Y él dijo:
   __Hallé los zapatos del rey en mi casa y tengo miedo; por eso no me atrevo a acercarme a ella
   Y ellos dijeron:
   __Vayamos al rey y le comentaremos un ejemplo de lo sucedido con esta mujer, pero no se lo explicaremos; y si fuere sabio, enseguida lo entenderá
   Y entraron ante el rey y dijéronle:
   __Señor, teníamos una tierra y se la dimos a este buen hombre para que la cultivase y la labrase y aprovechase sus frutos, y lo hizo así durante mucho tiempo; y la dejó una larga temporada sin trabajar.
   Y el rey dijo:
   __¿Y qué dices a esto?
   Y el buen hombre contestó:
   __Dicen la verdad. Que me dieron una tierra así como ellos dicen, y cuando fui un día por el campo, encontré huellas del león y me dio miedo de que me comería, y por eso dejé la tierra sin cultivar
   Y dijo el rey:
   __Es verdad que entró el león en ella, pero no te hizo nada que no tuviera que hacer, ni te hizo daño; por lo tanto vuelve a tu tierra y cultívala.
   Y el buen hombre volvió a su mujer y le preguntó qué había sido eso, y ella le contó todo y le contó la verdad de lo que había sucedido con él, y él la creyó por las indicaciones que le había dicho el rey, y después confiaba en ella más que antes.

El libro de los engaños,
en Cuentos de la Edad Media
(Castalia, Madrid, 1989, pp. 115-116)

FIDELIDAD


Hipocampo (Caballo de Mar)

 Símbolo de la fidelidad. 

El animal más fiel del Mundo.




La fidelidad es el esfuerzo de un alma noble para igualarse a otra más grande que ella... Johann W. Goethe


Soneto de Fidelidad

De todo, a mi amor estaré atento
Antes, con tal celo, y siempre y tanto
Que, aún enfrentando el mayor encanto
Más ha de encantarse mi pensamiento.
Quiero vivirlo en cada vano momento
Y en su honor esparcir mi canto
Y reír mi risa y derramar mi llanto
Con su pesar, con su contento.
Y así, cuanto más tarde me procure
Quién sabe la muerte, angustia de quien vive,
Quién sabe la soledad, fin de quien ama,
Pueda decirme del amor (que tuve):
Que no sea inmortal, puesto que es llama,
Pero sí infinito, por cuanto dure.
Autor: Vinicius de Moraes